Oklahoma City vence a Indiana en el séptimo partido y asegura su primer campeonato de la NBA

La lucha fue intensa y hermosa, casi de principio a fin, pero al final, el mejor equipo de la temporada ganó ante su público local, en un Paycom Center a rebosar. Oklahoma City ganó su primer campeonato de la NBA ( sus antecesores, los Seattle SuperSonics, se coronaron en 1979 ) el domingo gracias a su victoria en el séptimo partido de la final contra Indiana (103-91).

Tras perder rápidamente a su líder y base, Tyrese Haliburton, quien se retiró lesionado en el minuto 8, los hombres de Rick Carlisle se fueron al descanso con una pequeña ventaja gracias a un triple de Andrew Nembhard (48-47). Este éxito de Oklahoma City se concretó al volver al vestuario, en un tercer cuarto desequilibrado (34-20), durante el cual los Pacers perdieron nueve balones valiosos (21 en total). Esta diferencia, que llegó a los 22 puntos, nunca se redujo por completo a pesar de un TJ McConnell aún heroico (16 puntos) y un último cuarto mucho más disputado (22-23). ​​El enésimo milagro necesario para aspirar a la victoria no se produjo del lado de Indiana, un magnífico perdedor de tenacidad y coraje.

El cansancio acumulado durante los partidos reñidos inclinó la balanza a favor de Oklahoma City, el mejor equipo de la NBA durante la temporada regular (68 victorias y 14 derrotas), con un juego impecable. Shaï Gilgeous-Alexander (29 puntos), máximo anotador del séptimo partido, volvió a coronar su excepcional temporada con un prestigioso triplete: el trofeo de MVP de la temporada regular, el de máximo anotador de la NBA y el de MVP de las Finales. "Es muy emotivo. Con este grupo, nos merecemos este título, después de tantas horas de trabajo", reaccionó el canadiense de 26 años. El equipo entrenado por Mark Daigneault ganó el título tan solo un año después de su regreso a los playoffs y de ser eliminado en las semifinales de la Conferencia Oeste contra Dallas (2-4).

La recompensa por un juego rápido y rítmico, impulsado por una defensa férrea que volvió a destacar en este séptimo partido, como Alex Caruso (10 puntos, tres intercepciones), campeón por segunda vez en su carrera, tras el título ganado con Los Ángeles Lakers en 2020. "Oklahoma City tiene un equipo increíble ", comentó Sam Presti, gerente general y principal artífice de este título ganado por los Thunder. "Estos chicos representan todo lo bueno. Encarnan la noción del sacrificio. Todo sucedió tan rápido". Menos de dos años después de llegar a la cima de la Conferencia Oeste, este equipo ganó el Santo Grial. Una inspiración para Indianápolis, en busca de su primer anillo desde que llegó a la NBA en 1976.

84

Esta victoria en el séptimo partido de las Finales de la NBA es la 84.ª de Oklahoma City en la temporada, incluyendo la temporada regular y los playoffs. Es la tercera mayor cantidad en la historia de la NBA, empatada con Chicago en la temporada 1996-97, por detrás de Golden State en la temporada 2015-16 (88) y estos mismos Bulls en la temporada 1995-96 (87).