Fútbol Regional 2 femenino: Trélissac Parece estar listo para jugar el regreso.

Junto con Sarlat-Marcillac en la R2, los Trélissacoises parecen tener los recursos para desempeñar los papeles principales allí. Vienen de una buena segunda mitad de temporada.
Para la región del Périgord, esta es una muy buena noticia. El ascenso de Sarlat-Marcillac, campeón del Départemental 1, lleva a un tercer equipo a la categoría regional. Al mismo tiempo, esto reduce aún más el campeonato interdistrital Dordoña-Lot-et-Garonne, que, con solo seis equipos (incluidos cuatro del Périgord), ya no tiene mucho futuro. ¡Sobre todo porque Port-Sainte-Marie-Feugarolles ya ha sido descartado!
Lejos de eso, los Trélissacoises comenzarán este domingo (15:00 h), en su campo sintético, su segunda temporada en la Regional 2. Quizás la última dada la composición del Grupo B. Porque el TFC, tras haber asimilado su descenso de la R1, es uno de los aspirantes naturales al ascenso, junto con el Pôle palois, último en la élite regional la temporada pasada, y el Eysines. El equipo de las afueras de Burdeos se mantiene, de hecho, en tercer lugar en la R2, por detrás del Bayona y el Saint-Médard-de-Guizières, que han ascendido. Sin embargo, solo vencieron al Trélissac por diferencia de goles.
Gran preparaciónTras quedarse a las puertas del podio por poco, los jugadores de Laurie Boyer, como es lógico, buscan mejorar esta temporada. Se han estado preparando para ello con numerosos partidos amistosos desde el 20 de agosto: contra Saint-Pantaléon-de-Larche (R2, Grupo A, en Trélissac), Blagnac (R2 d'Occitanie, en Montignac), Soyaux (R1, en Charente), Montbazens-Rignac (R2 d'Occitanie, en Antonne) y Saint-Médard-de-Guizières el domingo pasado en Trélissac. La mayoría de ellos se ganaron, como el último, simplemente para ganar confianza antes de comenzar el campeonato contra el recién ascendido Bouscatais.
Mientras tanto, los Sarladaises viajarán al equipo de reserva de Gradignan para descubrir la Regional 2. Los Bergeracoises también estarán de visita, en Limoges. Un comienzo difícil para un equipo acostumbrado a la competición de la R1.
Dordogne Libre