Un dentista a tiempo completo se prepara para competir con Rory McIlroy y Scottie Scheffler en el US Open semanas después de perder a su padre por cáncer.

El dentista Matt Vogt está decidido a sacar la mayor alegría posible de su emotivo regreso a casa, ya que hace su debut en el US Open solo un par de meses después de perder a su padre por cáncer.

El hecho de que el torneo se juegue en Oakmont, Pensilvania (donde Vogt fue caddie durante seis años cuando era joven antes de obtener una beca universitaria) hace que el evento sea aún más conmovedor.

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Vogt, de 34 años, nació y se crió a unas pocas millas de Oakmont .

Por eso tiene garantizado mucho apoyo esta semana, especialmente porque las cadenas de televisión estadounidenses han estado presentando su historia como un cuento de hadas moderno.

Con una altura de 1,98 m, no será difícil detectar a este aficionado de gran pegada.

Y espera experimentar una montaña rusa de emociones en los próximos días.

Su padre, Jim, murió de cáncer de colon apenas unas semanas antes de que Vogt se ganara un lugar en el US Open de la manera más difícil, ganando una serie regional y luego terminando en lo más alto de la clasificación nuevamente en una final muy disputada.

Dos 68 golpes consecutivos en Wine Valley en Washington le permitieron terminar por delante de muchos jugadores experimentados del PGA Tour .

Así que tiene mucho juego, a pesar de que nunca ha considerado siquiera hacerse profesional.

Vogt alternaba entre una amplia sonrisa y luchaba por contener las lágrimas mientras explicaba lo que significaba jugar en un campeonato importante a solo unos metros de donde solía pasar el rato en la caseta de caddies.

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Comentó: "¡Oh, vaya! ¡Dios mío! No sé por dónde empezar".

"Solo espero que lo que me ha sucedido sirva de inspiración a todo aquel que esté pasando por un momento difícil y se pregunte cuándo sucederá lo próximo bueno.

“Creo que todo el mundo sabe sobre el fallecimiento de mi padre, y seguramente lo tendré muy presente en la mente esta semana, especialmente porque el domingo es el Día del Padre.

“Incluso caminando por el noveno fairway hoy después de firmar algunos autógrafos para algunos niños pequeños, lo cual fue bastante impresionante, por cierto, levanté la vista y pensé en ello.

“Cualquiera que haya perdido a un padre siente breves estallidos de emoción de vez en cuando.

Tenía cáncer de colon. Llevo el lazo azul por eso y rezo todas las noches por las personas afectadas por el cáncer.

Es horrible, horrible. Le dieron ese diagnóstico el año pasado y no fue nada bueno.

En los últimos meses, antes de su fallecimiento, se notaba que estaba empezando a pasar factura. Es emotivo, pero, sinceramente, sé que está en un mejor lugar.

“Estaba empezando a sufrir, y eso es algo que nadie quiere ver nunca.

Aunque desearía que todavía estuviera aquí con nosotros, hay una sensación de paz en nuestra familia. Y espero que él también esté en paz, porque fue duro.

“Y yo, que ahora tengo una hija de 15 meses, siento que en los últimos meses, de alguna manera, he pasado de ser un niño a un hombre y he madurado como persona y como padre”.

Vogt, que ha jugado en los torneos de golf US Amateur y Mid-Amateur, ha recibido una lluvia de mensajes de buena suerte de sus pacientes, colegas dentistas, otros jugadores y los caddies locales, que lo apoyan.

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