España-Francia: Estos azules que (realmente) perdieron puntos

Derrotada por 5-4 ante España en las semifinales de la Liga de Naciones, la selección francesa falló en muchos aspectos. Y algunos jugadores no estuvieron a la altura.
Clément Lenglet, una noche de pesadilla. No jugaba con los Blues desde 2021 y su noche en Stuttgart podría enviarlo de vuelta a la defensa de la selección. Alineado con Ibrahima Konaté el jueves por la noche, el defensa del Atlético de Madrid, cedido por el FC Barcelona, tuvo un partido de pesadilla. Había comenzado bien, ganando duelos y mostrando una limpieza técnica encomiable. Pero ante la velocidad de los españoles, su juego de pases y su movimiento en espacios reducidos, se vio gravemente afectado. Fue sorprendido en el segundo gol, fue un espectador en el 4-0 y fue devorado por Yamal en el 5. Es mucho para un solo hombre... De regreso a Madrid el martes por "problemas personales", Clément Lenglet (16 partidos internacionales) mostró sus límites a este nivel y perdió puntos ante la competencia (Saliba, Hernández, etc.). En estas condiciones, es difícil imaginarlo de vuelta con los Blues pronto.
Ibrahima Konaté, un veterano en apuros. Sonriendo y bromeando ante los medios la víspera del partido contra los campeones de Europa de 2024, el parisino de 26 años se perdió su partido en Stuttgart. Con su estatus de veterano y titular en el Liverpool, se esperaba mucho más de él. Luchó contra el perfil de Oyarzabal y nunca pudo estar a la altura de lo que se esperaba de él en la selección nacional. Dominado en los duelos, nunca tranquilizador y con un juego propenso al desperdicio, Ibrahima Konaté jugó en la misma línea que su último mal partido en Croacia el pasado marzo (derrota por 2-0), la noche en que fue sustituido en el descanso. Su pobre rendimiento deja el camino abierto para la dupla Saliba-Upamecano en la jerarquía de Les Bleus.
Lea también: Las puntuaciones del Blues ante España: una defensa catastrófica, un mediocampo lento y un ataque caricaturizado
Théo Hernandez, un defensa al que no le gusta defender Todo el mundo conoce las cualidades de contraataque del jugador del Milán, cuyo nombre se menciona en Arabia Saudita, y lo demostró de nuevo el jueves con algunas carreras interesantes que podrían haber dado en el blanco. Su disparo al larguero en la primera mitad es un ejemplo. Pero eso no puede ocultar su propensión a no defender adecuadamente. En una gran dificultad contra Lamine Yamal, dio la impresión de aceptar el dominio del prodigio, sin atacarlo nunca, por miedo a ser eliminado por una jugada con clase. Durante todo el partido, sufrió, falto de agresividad y rigor. A este nivel, es preocupante. La competencia con Lucas Digne, que defiende mejor, lo cual es muy importante para un defensa, sigue siendo más relevante que nunca.
Manu Koné, límites demostrados Fue un partido interesante en el que el romano de 24 años pudo dar respuestas sobre su progreso a nivel internacional. Desafortunadamente, el perfil técnico y vivaz de los españoles lo lastimó. Por momentos, le dio vueltas la cabeza. Desde el comienzo del partido, podría haber sido amonestado con tarjeta amarilla por una entrada sin control. Al atacar, quiso demostrar sus cualidades, pero también desequilibró a un equipo que ya tenía dificultades cuando La Roja tenía el balón. Técnicamente, sufrió por la comparación con Pedri y Merino en el mediocampo, a lo que no ayudó el declive de Adrien Rabiot. Sus recientes actuaciones hablan a su favor, pero el partido perdido contra el mejor equipo de Europa también muestra el camino que aún tiene que recorrer. Todavía demasiado débil para aspirar a un puesto de titular con Francia.
lefigaro