Norris y Piastri reviven la guerra Hamilton-Button en McLaren: dos conflictos casi idénticos separados por 14 años

Oscar Piastri y Lando Norris tuvieron un encontronazo en las últimas vueltas del Gran Premio de Canadá de Fórmula 1. Al pelear por la cuarta posición, el británico golpeó el monoplaza de su compañero, en una acción extremadamente similar a la vista exactamente 14 años atrás, en el mismo punto del circuito, y de nuevo con los dos pilotos de McLaren involucrados.

En los últimos giros, los representantes de la escudería papaya alcanzaron a Kimi Antonelli, tercero, pero el tiempo perdido con un grupo de doblados dio aire al italiano. Norris aprovechó la situación para abalanzarse sobre su compañero, y tras un kilométrico paralelo, intentó buscar el interior en la primera curva, pero calculó mal, tocó el difusor de Piastri y se empotró con el muro en plena recta de meta. "La culpa es mía", dijo por la radio antes de abandonar su maltrecho MCL39.

El incidente no solo ha desatado una oleada de críticas a Lando Norris, sino también a los comisarios, por imponerle una penalización que afecta a su clasificación en el GP de Canadá, que no llegó a terminar, en vez de pasarla a la siguiente prueba, y por no quitarle puntos en la superlicencia, como es costumbre en una colisión de estas características.

Pero además, el accidente sorprende por ser prácticamente idéntico a uno que tuvo lugar en el mismo punto del Circuito Gilles Villeneuve en 2011, precisamente con los dos pilotos de McLaren involucrados, aunque en aquella ocasión fueron Jenson Button y Lewis Hamilton los protagonistas.

En la vuelta 8 de la carrera más larga de la historia de la Fórmula 1 (más de cuatro horas), Hamilton intentó adelantar a Button en la recta de meta, pero el ahora piloto de Ferrari acabó con daños en la suspensión trasera y sin alerón delantero, por lo que tuvo que abandonar. Su compañero deterioró su monoplaza tras llevarse por delante a Fernando Alonso, tuvo que parar cuatro veces y cumplir con un drive-through, y aun así acabó ganando la prueba gracias a un error de bulto de Sebastian Vettel.